Solo han pasado dos días, dos noches
Solo ha sido una fugaz ausencia
Solo ha sido un tiempo sin su presencia
Y ella se siente perdida en la sombra de su soledad
Le falta su amor…sus dulces palabras
Su compañía…
No quiere que llegue la noche
Sabe que con ella llega el vacío, el temor…
La tristeza la invade
Besos, abrazos y caricias que destrozan el corazón
Sentimientos que ya no existen
Miedo y desamor a flor de piel
En sus ojos se refleja el dolor que lleva en el alma
Besos que saben amargos
Caricias que duelen, que clavan como espinas.
Ella inmóvil, sin decir una palabra
Solo un frío recorre su cuerpo,
Solo siente como su corazón se inunda con cada lágrima
Con cada amanecer una nueva herida
Solo desea levantarse y correr,
Huir donde nadie la lastime
Donde nadie la juzgue
Donde no tenga que ser mujer por obligación.
Como quisiera que fuera él, quien este a su lado
Y no volver a sentir ese vacío que mata
Que la llena de dudas y temores
Un sin fin de lágrimas en sus ojos
Hasta que el sueño se apodera de ella
Y ahí esta él, lo siente tan cerca, tan suyo
Sus labios la besan, sus manos recorren su cuerpo
Ella parece volar con cada caricia…
Es cuando llega la entrega verdadera
El deseo, el placer con cada beso
El fuego y la pasión del verdadero amor
El tiempo se detiene…
Solo el latido de su corazón se deja escuchar
Las palabras sobran…
La felicidad en sus ojos al estar frente a él lo dice todo,
El amor de aquel ángel de sus sueños
Y la ilusión de algún día despertar entre sus brazos
La mantienen de pie y con fuerzas para luchar día a día.
Solo ha sido una fugaz ausencia
Solo ha sido un tiempo sin su presencia
Y ella se siente perdida en la sombra de su soledad
Le falta su amor…sus dulces palabras
Su compañía…
No quiere que llegue la noche
Sabe que con ella llega el vacío, el temor…
La tristeza la invade
Besos, abrazos y caricias que destrozan el corazón
Sentimientos que ya no existen
Miedo y desamor a flor de piel
En sus ojos se refleja el dolor que lleva en el alma
Besos que saben amargos
Caricias que duelen, que clavan como espinas.
Ella inmóvil, sin decir una palabra
Solo un frío recorre su cuerpo,
Solo siente como su corazón se inunda con cada lágrima
Con cada amanecer una nueva herida
Solo desea levantarse y correr,
Huir donde nadie la lastime
Donde nadie la juzgue
Donde no tenga que ser mujer por obligación.
Como quisiera que fuera él, quien este a su lado
Y no volver a sentir ese vacío que mata
Que la llena de dudas y temores
Un sin fin de lágrimas en sus ojos
Hasta que el sueño se apodera de ella
Y ahí esta él, lo siente tan cerca, tan suyo
Sus labios la besan, sus manos recorren su cuerpo
Ella parece volar con cada caricia…
Es cuando llega la entrega verdadera
El deseo, el placer con cada beso
El fuego y la pasión del verdadero amor
El tiempo se detiene…
Solo el latido de su corazón se deja escuchar
Las palabras sobran…
La felicidad en sus ojos al estar frente a él lo dice todo,
El amor de aquel ángel de sus sueños
Y la ilusión de algún día despertar entre sus brazos
La mantienen de pie y con fuerzas para luchar día a día.
(Caro)
